CIAM SE PRONUNCIA SOBRE LA SUSPENSIÓN PROVISIONAL DEL APROVECHAMIENTO FORESTAL E INSTALACIÓN DE LA COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN
El Centro de Incidencia Ambiental (CIAM), considera como positiva la decisión del Ministerio de Ambiente de suspender por un término no mayor de un año el otorgamiento de permisos especiales, permisos comunitarios y concesiones de aprovechamiento forestal, en bosques naturales a nivel nacional.
Para CIAM esta medida en el momento, es la más apropiada para lograr el ordenamiento del aprovechamiento del recurso forestal de bosques naturales; pero advierte, que es de vital importancia analizar todas las causas de la deforestación del país, y no sólo la contribución por los incumplimientos y abusos del aprovechamiento forestal legal e ilegal, así como la necesidad de definir acciones concretas que frenen a todos los impulsadores de dicha deforestación. El peor ejemplo de lo anterior, es la provincia de Darién, donde la problemática es compleja y la solución requiere de un verdadero cambio en las políticas públicas en todos los niveles. Esta región implica que el contexto socioambiental del área incluye la pobreza material de la población, la escasa escolaridad de los mismos, el aislamiento, la falta de vías de comunicación, el tráfico de sustancias ilícitas y personas, la presencia de grupos armados en la zona, así como una agenda estatal que a lo largo de las décadas ha dejado a Darién en el abandono y sin medios productivos que vayan más allá de un manejo extractivo de los recursos naturales.
De acuerdo con los especialistas de CIAM, en este marco se ha abusado de un sistema de permisos excepcionales contemplado por la Ley Forestal de 1994 sólo para personas de escasos recursos económicos, otorgándose, en muchos casos, a personas que no cumplen los requisitos legales o en exceso de los volúmenes máximos, para sostener una operación de tipo comercial que se lleva los mayores beneficios, y que es liderada por empresas madereras. Por otro lado, en la tala y la quema ilegal con fines agropecuarios, donde Darién tiene su más rudo verdugo, y sobre las cuales aún no se han anunciado medidas concretas
Frente a todo ello, la escasa fiscalización por parte del Ministerio de Ambiente en pasadas administraciones, y no contar con los recursos para darle seguimiento al área protegida más grande del país y a las demás zonas boscosas; instrumentos de gestión desfasados, sin monitoreo constante ni uso de tecnología satelital, drones o de otro tipo que permita visualizar en tiempo real los sitios y estados de los mismos Las falencias en el último eslabón de defensa son fundamentales, la falta de sanción por parte de las autoridades judiciales de los delitos ambientales, en medio del abuso de vacíos legales en la normativa que permiten que estos delitos terminen en la no culpabilidad de los involucrados o sin siquiera llamamientos a juicio; y la falta del suficiente apoyo por parte de los estamentos de seguridad.
Adicionalmente, CIAM considera que la instalación de una comisión especial de investigación sobre la tala en Darién por el pleno de la Asamblea Nacional es una iniciativa legislativa para el ejercicio de fiscalización necesario en el diseño de los pesos y contrapesos de nuestro Estado de Derecho, así como una oportunidad para comprender la problemática humana de una provincia que ha sido abandonada por los gobiernos durante décadas. Esperamos que este conocimiento los comprometa en su gestión legislativa a acciones precisas como apoyar una transformación transparente y técnica de la Ley Forestal de 1994, ampliar el presupuesto de inversión social en Darién, y brindar apoyo permanente a los Ministerios que se pueden encargar de las problemáticas diarias como Ambiente, Salud, Educación, Desarrollo Social, Agricultura y Seguridad, en las labores que realizan.
Por último, invitamos a la población panameña preocupada por la deforestación del país y en particular de la provincia de Darién, a revisar sus propias prácticas de consumo, para aportar su grano de arena en la solución de un problema que nos compete a todos.
El poder ciudadano, está en hacer cumplir la ley.
FIN DEL COMUNICADO