CIAM logra reafirmación de la importancia de la participación, en particular en la regulación del caudal ecológico para la protección de los recursos hídricos.
La Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia anula por ilegal una regulación por la cual se fijaba en 10% el caudal ecológico de todos los ríos del país sin sustento técnico y sin haber sometido la iniciativa a un proceso de consulta pública donde los ciudadanos pudieran cuestionar y aportar al establecimiento de esta metodología. El tribunal estima que se violaron una serie de obligaciones legales que exigen a la autoridad ambiental someter las decisiones ambientales a participación ciudadana, la cual es prerrequisito para asegurar el desarrollo sostenible y la democracia participativa.